Cancer tipo uno y tipo dos en los mecanismos lubricados

Hablar de cáncer en los mecanismos lubricados de las máquinas, parecería que no tiene sentido, porque esto es propio de los seres humanos, pero en este caso se hace referencia a situaciones imperceptibles cuando comienzan, que avanzan poco a poco y cuando finalmente se quiere corregir el problema ya es demasiado tarde y la única solución que queda es la de reemplazar el mecanismo por otro nuevo porque ha quedado completamente inservible o por fuera de especificaciones.
Es muy importante dejar claro que el desgaste siempre se va a presentar, es imposible evitarlo, pero mediante el monitoreo periódico del aceite en el laboratorio o del mecanismo por vibraciones o termografía, se puede garantizar que es normal y no va a conducir a una situación de falla antes de la terminación de la vida disponible. Los tipos de desgaste básicos que se pueden presentar son adhesivo, fatiga superficial, erosiva, abrasiva y corrosiva. Los que conducen a problemas de cáncer tipo 1 son la falla por fatiga superficial y el de tipo 2 es la falla por erosión. ¿Por qué se pueden relacionar como un cáncer? ; porque no se sienten y en algunos casos es complicado detectarlos por algunas de las prácticas de monitoreo.

CÁNCER TIPO 1

 El cáncer tipo 1 en los mecanismos lubricados es la falla por fatiga superficial, la cual conlleva al aceleramiento de los ciclos de fatiga y a la disminución severa de la vida disponible. Se caracteriza por la aparición prematura de fisuras debajo de la zona de fricción, como resultado de la falta de amortiguamiento de la película lubricante, ya sea porque en el caso de la lubricación hidrodinámica (HD) la capa fluída 3 está afectada por una mala selección del grado ISO (bajo o alto) del aceite que se debe utilizar, contaminación con otros fluidos como el agua o aceites de menor viscosidad, falta de enfriamiento o por problemas mecánicos como desalineamiento, desbalanceo, sobrecargas, etc., que cambian el estado de la fricción (fluída a mixta), elevando la temperatura de operación y dando como resultado la disminución de la viscosidad del aceite, o en el caso de la lubricación Elastohidrodinámica (EHL) por la utilización de un aceite de menor grado ISO o con aditivos extrema presión (EP) inadecuados, esto es, si se requieren de tipo EP2 utilizar de tipo EP1. La capa fluída 3 ya sea completa en lubricación HD o parcial en EHL se comporta como miles de resortes que amortiguan y hacen que la energía transmitida por las cargas dinámicas sea absorbida al máximo de tal manera que la intensidad de los ciclos de fatiga sea mínima y el mecanismo pueda alcanzar la vida disponible. Ver Figura 1.

«Es muy importante dejar claro que el desgaste siempre se va a presentar, es imposible evitarlo…»

Para evitar que se presente la falla por fatiga superficial, es necesario
tener en cuenta los siguientes aspectos:

• Utilizar el aceite del grado ISO correcto.
• Utilizar el tipo de aditivo antidesgaste AW o EP correctos.
• Utilizar aceites con el mayor Indice de Viscosidad (IV) posible.
• Mantener permanentemente la temperatura de operación en la zona de fricción dentro de la ventana operativa OC (Operación Confiable).
• Verificar el estado de los enfriadores de aceite y mantenerlos en óptimas condiciones.
• Monitorear el contenido de metales de desgaste presentes en el aceite por lo menos cada tres meses, y estar atentos si el valor hallado en partes por millón (ppm) se sale del rango de desgaste normal. En caso afirmativo puede ser que se esté presentando un desgaste adhesivo incipiente que incentiva la falla por fatiga superficial.
• Tomar valores de vibración y termografía con la misma frecuencia de los análisis de laboratorio, con el fin de verificar si hay problemas de sobrecargas dinámicas sobre el mecanismo o si la temperatura está por encima del valor normal lo cual puede ocasionar disminución en la viscosidad del aceite.
• En caso de contaminación del aceite con otro de menor viscosidad, cambiarlo y si es con agua someterlo a un proceso de termovacío hasta dejarlo completamente seco.
• Si cambian las condiciones operacionales de la máquina y las cargas dinámicas aumentan se debe hacer un análisis tribológico con el fin de determinar si la viscosidad del aceite es la misma y de los aditivos AW y EP. En la mayoría de los casos cuando se presenta este tipo de situaciones, la viscosidad y el tipo de aditivos metálicos son
  diferentes a los que inicialmente tuvo en cuenta el fabricante de la máquina.
• Se debe verificar que el componente tenga venteo, ya que si no lo tiene, se presuriza la carcasa y el aire caliente al enfriarse genera aguas, la cual se mezcla con el aceite disminuyendo su viscosidad. Se debe tener claro que el desgaste por fatiga superficial es una situación normal e inherente a la vida disponible Vd del mecanismo, que de todas maneras, después de que ésta se cumpla y si el mecanismo no se cambia,
  se presentará la falla por fatiga superficial. Son dos conceptos que tienen que ver con lo mismo, pero el primero es una condición normal e inevitable, mientras que el segundo es anormal y controlable.

La probabilidad de que ocurra la falla por fatiga superficial depende del índice de Viscosidad (IV) del aceite ISO, de acuerdo con la prueba ASTM D2270 y de la temperatura de operación, ºC en la zona de fricción y de qué magnitud de incremento se puede presentar en un momento dado como resultado del aumento de la misma por un enfriamiento deficiente o por aumento en la fricción por una deficiente película lubricante ho. por sobrecargas dinámicas. Ver Gráfico 1.

Por ejemplo, si la temperatura en la zona de fricción del cojinete liso de alta presión de una turbina de vapor es de 65ºC y el Indice de Viscosidad del aceite ISO es de 220, la probabilidad de que se presente la falla por fatiga superficial es del 0%. Ver Gráfico 1.

En este caso, si la temperatura de operación, ºC, por alguna razón en la zona de fricción aumentará 30ºC, o sea de 65ºC a 95ºC, se tendría que la probabilidad de que se presente la falla por fatiga superficial sería del 15% y a la misma temperatura de operación, si se utilizase un aceite ISO con un IV de 95 la probabilidad de que se presente la falla por fatiga superficial sería del 33%. En este caso, con fines didácticos se omitió el análisis de si a estas condiciones de temperatura de operación se rompe la película lubricante, ho y se presenta primero la falla por adhesión, antes que la falla por fatiga superficial (este análisis se hace calculando el factor de seguridad de la película lubricante, λ, para la nueva temperatura de operación en la zona de fricción).

CÁNCER TIPO 2

El cáncer tipo 2 en los mecanismos lubricados es la falla por erosión, la cual conlleva a la pérdida de tolerancias entre las superficies de fricción, afectando el espesor de la película lubricante, ho al evitar que el aceite tenga el tiempo suficiente de residencia en la zona de fricción para absorber la máxima cantidad de calor posible y mantener de esta manera la temperatura de operación dentro del rango confiable y por lo tanto la viscosidad del aceite. La falla por erosión no es perceptible por ninguna de las técnicas conocidas como la espectrofotometría de absorción atómica, el conteo de partículas, la ferrografía, etc, lo que hace más difícil poderla detectar y evitar. Más aún si se hace una inspección visual, como en el caso de engranajes y cojinetes lisos, las superficies afectadas por la erosión muestran un aspecto suave y brillante que pueden conducir a pensar que el mecanismo está operando correctamente y que antes por el contrario su desempeño es normal.
Ver Figura 2.

El desgaste erosivo conlleva a pérdidas de material normales en el tiempo y a cambios dimensionales que definen el valor de la vida disponible, Vd en horas de operación. La falla por erosión acelera la pérdida de material y el cambio dimensional, lo cual se puede ver reflejado en la rata de desgaste en partes por millón (ppm) que va a ser mayor que la tendencia al desgasten ppm y el cambio dimensional como lo son el backlash en engranajes y el juego diametral en cojinetes lisos dentro de una frecuencia de inspección determinada estarán por encima del valor normal. Más aún es factible que la evaluación de la falla por erosión pase inadvertida cuando se hace teniendo en cuenta la rata de desgaste si el volumen de aceite con que trabaja el componente es alto, ya que entre mayor sea éste, el contenido de partículas metálicas de desgaste en el aceite se diluyen más, por ejemplo, no es lo mismo que el mecanismo por erosión desprenda 100 ppm de cobre (Cu) y se diluyan en 10 galones de aceite que en 2000 o más galones. La falla por erosión es difícil de controlar pero no imposible, debido a que se genera como resultado del paso de partículas sólidas de una dureza mayor que la del material con el cual friccionan, de un tamaño menor que el espesor de la capa fluída 3 de la película lubricante ho , haciendo referencia de esta manera a partículas cuyo tamaño está en el orden de 4 micras hacia abajo, las cuales al entrar en la zona de fricción se desordenan debido a la tendencia que tiene el aceite de cambiar sus condiciones de flujo laminar, en el cual la capa límite no se mueve a turbulento, donde la capa límite se mueve haciendo que las partículas presentes en el aceite erosionen la rugosidad de las superficies
de fricción, desgastándolas y aumentando de esta manera las tolerancias entre ellas. El problema es más crítico en aquellos mecanismos donde la condición de lubricación es EHL debido a las menores tolerancias que se presentan y a las mayores temperaturas de operación en la zona de fricción debido a las altas cargas dinámicas que actúan sobre las superficies de fricción como resultado de los mayores torques transmitidos.
La probabilidad de que ocurra la falla por erosión depende del nivel de limpieza mínimo del aceite de acuerdo con ISO 4406-99 y el tipo de mecanismo y de la temperatura de operación, ºC en la zona de fricción y de qué magnitud de incremento se puede presentar en un momento dado como resultado del aumento de la misma por un enfriamiento deficiente o por aumento en la fricción por una deficiente película lubricante ho o por sobrecargas dinámicas. Ver Gráfico 2.

Por ejemplo, si la temperatura en la zona de fricción del cojinete liso de alta presión de una turbina de vapor es de 65ºC y el nivel mínimo de limpieza del aceite ISO es de 18/17/15, la probabilidad de que se presente la falla por erosión es del 0%.
Ver Gráfico 2.

El concepto de nivel mínimo de limpieza es de 2 códigos por encima del valor estándar especificado por ISO 4406-99, o sea, que si la recomendación ISO 4406-99 para los cojinetes lisos de la turbina de vapor es de 16/15/13, el nivel mínimo de limpieza es 18/17/15. En este caso, si la temperatura de operación, ºC, por alguna razón en la zona de fricción aumentará 10ºC, o sea de 65ºC a 75ºC con el mismo nivel de limpieza del aceite ISO, se tendría que la probabilidad de que se presente la falla por erosión sería del 5% y si bajo estas condiciones de temperatura de operación el nivel de contaminación del aceite pasara de 18/17/15 a 24/23/21 la probabilidad de que se presente la falla por erosión es del 15%.

Es muy importante tener claro, que el desgaste por erosión es una condición normal que se va a presentar aun cuando el aceite ISO se mantenga dentro del rango de limpieza, o sea en el ejemplo analizado entre 16/15/13 y 18/17/15 y que la vida disponible Vd es calculada con base en el nivel mínimo de limpieza permisible; pero la falla por erosión si es una condición de desgaste erosivo anormal que conduce a la disminución de la vida disponible, en un porcentaje que depende del incremento que se tenga en la temperatura
de operación en la zona de fricción y del nivel de limpieza con que se trabaje el aceite ISO. En la Tabla 1 se especifican las recomendaciones del nivel de limpieza con que se debe trabajar el aceite ISO dependiendo de la máquina donde trabaje el mecanismo lubricado, con sus respectivos límites OC, OF y EF y en la Tabla 2 los rangos de la cantidad de partículas que contiene cada código de contaminación de acuerdo con la especificación ISO 4406-99.

Para evitar que se presente la falla por erosión es necesario tener en cuenta los siguientes aspectos:

1. Verificar que el equipo tenga venteo, haya sido seleccionado correctamente y esté en buen estado.
2. Seleccionar correctamente el nivel de limpieza ISO 4406-99 del aceite ISO de acuerdo con el tipo de máquina y mecanismo lubricado.
3. Verificar que el aceite ISO nuevo entregado por el fabricante cumpla con el nivel de limpieza ISO 4406-99 requerido.
4. Mantener el aceite ISO dentro del valor de limpieza mínimo permisible, valor OC, especificado en la Tabla 1, en caso contrario filtrarlo hasta garantizarlo.
5. Monitorear el nivel de limpieza del aceite ISO con una frecuencia máxima de 3 meses.
6. Garantizar el almacenamiento, manejo y uso correcto del aceite ISO.
7. Hacer flushing al depósito o carter de la máquina, cada vez que se le cambie el aceite ISO.

CONCLUSIONES

1. El cáncer tipo 1 que es la falla por fatiga superficial y el cáncer tipo 2, la falla por erosión, son silenciosos, no se sienten y en la mayoría de los casos no se detectan en la etapa inicial con las técnicas de monitoreo conocidas hasta el momento. Solo se reflejan en los mecanismos lubricados cuando ya no hay solución y es necesario reemplazar el mecanismo antes de que llegue al final de su vida disponible, Vd.
2. Lo más indicado para el cáncer tipo 1 y tipo 2 en los mecanismos lubricados es la prevención, para lo cual la clave es utilizar el aceite dentro del código ISO 4406-99 recomendado, mantener la temperatura en la zona de fricción dentro del rango confiable de 55º a 65ºC y utilizar aceites con el mayor Indice de Viscosidad (IV) posibles.